
El fundador de Vox y exdirigente del Partido Popular Alejo Vidal-Quadras ha defendido de nuevo, esta vez ante la Audiencia Nacional, que el régimen iraní estuvo detrás de su intento de asesinato en noviembre de 2023. Además, ha detallado ante el juez instructor Santiago Pedraz que el disparo que recibió en la cara le ha dejado algunas secuelas como parálisis en el rostro, pérdida de audición y estrés postraumático.
La comparecencia de Vidal-Quadras ha comenzado precisamente con las preguntas de Pedraz, titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, sobre el atentado que tuvo lugar el 9 de noviembre de 2023. El político ha explicado al instructor lo que ocurrió, y a la salida de la Audiencia lo ha relatado también ante los medios: «Ese día volvía de andar por el [parque del] Retiro. Oí una voz que decía: ‘Hola, señor’. Entonces giré la cabeza y recibí el disparo«.
Aquel gesto instintivo le salvó la vida porque hizo que el disparo le impactase en la mandíbula en vez de ir a parar a su nuca. Pero eso no lo supo hasta días más tarde, porque en aquel momento Vidal-Quadras perdió la consciencia. «No recuerdo nada más hasta que me levanté en la UCI cuatro días más tarde», ha explicado este martes.
De todos modos, desde el primer momento el cofundador de Vox tuvo claro que había sido víctima de un atentado ordenado por el régimen iraní, y así lo ha defendido ante Pedraz. Se ha apoyado en ciertos indicios, como «la larga historia de crímenes del régimen» o «la aparición de una lista de sancionados por Irán en 2022» en la que Vidal-Quadras figura en el primer puesto.
Según fuentes jurídicas, este listado no solo incluye su nombre, también el de dos entidades relacionadas con él y su labor de oposición al régimen. «Todo eso obra en poder del juez», ha confirmado el político, convencido de que «los indicios [que apuntan a la autoría del régimen iraní] son cada vez más claros».
Otro de los puntos esclarecedores a los que ha aludido el exdirigente del PP es la identidad del autor material del delito, el francés de origen tunecino de 37 años que apretó el gatillo. «El sicario que me disparó a mí está en prisión en Holanda», ha explicado Vidal-Quadras, «fue detenido cuando iba a matar a un periodista iraní que también es opositor al régimen, lo detuvieron cuando estaba a punto de forzar la entrada de su casa para matarlo». Su detención en Holanda sirvió para acreditar la conexión de la Mocro Maffia con el atentado.
Actualmente, este hombre llamado Mehrez Ayari es uno de los ocho detenidos envueltos en el intento de asesinato, si bien las autoridades españolas están esperando a que Holanda entregue temporalmente a este sicario y a otra mujer relacionada con el caso. También está detenido el hermano del presunto autor material del delito, una mujer holandesa y un venezolano presuntamente implicado en la adquisición de la motocicleta que utilizó el sicario el 9 de noviembre.
Por otro lado, en España fueron detenidos días después del intento de asesinato una pareja en Granada y un joven en Málaga. Finalmente, el último mes de noviembre fue detenido en Pinos Puente (Granada) otro hombre que supuestamente habría facilitado al autor material el arma que usó en el atentado.