Dos de cal y otra de arena. Si la semana pasada Junts echó por tierra en el último momento la ley de alquileres temporales y esta semana obligó al Gobierno a retirar la votación de la senda de estabilidad, este jueves los de Carles Puigdemont han ‘salvado’ la Ley de Movilidad Sostenible al anunciar el voto en contra a la enmienda a la totalidad del PP, que pedía retirar un proyecto de ley que el Gobierno se comprometió con Bruselas a aprobar antes de que termine del año y del que depende fondos europeos. Según ha explicado el portavoz del Junts en el debate, Isidre Gavin, esta formación se esperará a las enmiendas parciales, donde ha asegurado tener el «compromiso» del Ejecutivo de reducir la centralización de la norma, que no «intervendrá» la gestión de l transporte público por parte de la Generalitat.
«Teníamos muchos motivos para presentar una enmienda a la totalidad, pero no la hemos presentado porque en el diálogo con e PSOE de la ley hemos llegado a un compromiso de que a través de las enmiendas parciales desharemos algunas de las discrepancias», ha dicho Gavin tras criticar el proyecto de ley por «centralista«.
«Se respetará de forma clara las competencias de la Generalitat y de otras administraciones, se reducirán y simplificarán la propuesta de organismos [estatales sobre movilidad]», ha añadido el diputado de Junts, que ha añadido que «la alternativa no se votar una enmienda del PP», por su «expediente» en materia de «centralismo».
Puente ve el veto «oportunista»
Gavin ha confirmado de esta manera que la enmienda a la totalidad no saldrá adelante antes de una votación de la que ha resultado que solo PP y Vox la han apoyado. Los siete votos de Junts habrían sido claves, por tanto. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha abierto el debate calificando de «oportunista» y «destructiva» la enmienda a la totalidad del PP a la Ley de Movilidad Sostenible, que de prosperar en la votación que celebrará este jueves el Congreso hará decaer una norma comprometida con la Comisión Europea a cambio de fondos europeos. «España puede perder 10.000 millones de fondos europeos», ha precisado el portavoz socialista en la comisión de Transportes, Nacho López, que liderará ahora la negociación de las enmiendas parciales que este jueves todos los grupos han advertido que harán en materias tan diversas como para impulsar más el transporte público, las inversiones o las competencias autonómicas. «Les aseguro que la mano está tendida», ha afirmado Puente, consciente del «apoyo crítico» que ha concitado hoy su ley en el Congreso.
La Ley de Movilidad Sostenible contempla distintas medidas para promover la descarbonización del transporte urbano y para poner a las personas «en el centro» mediante fórmulas alternativas al coche, como el impulso a la bicicleta o la peatonalización, fomentar el vehículo compartido, el tren y particularmente para el transporte de mercancías o la posibilidad de que los alcaldes que lo deseen pongan peajes urbanos. Según algunas de sus disposiciones, los ayuntamientos deberán elaborar planes de movilidad sostenible, donde las zonas de bajas emisiones serán puntos clave y obligará a las empresas de a partir de 250 trabajadores a diseñar también planes de movilidad para sus empleados. La norma también apuntan a una regulación posterior, la renovación del mapa concesional de rutas interurbanas de autobús para lo que el Gobierno ofrece 40 millones a las comunidades para que asuman las que discurran dentro de sus territorios, menos rentables.
«Oportunista» y «vago»
Al inicio del debate, Puente había recordado que en la legislatura pasada, cuando empezó a tramitarse el proyecto de ley por primera vez, el PP nunca mostró su intención de querer vetarla y que el pasado mes de marzo volvió a permitir su tramitación parlamentaria de una ley cuya retirada pide ahora. «Qué ha cambiado para que en marzo su grupo dijera que iba a trabajar para conseguir la mejor ley», se ha preguntado.
«Lamento este cambio de planteamiento porque me parece incoherente a la par que irresponsable, oportunista y que hace daño al país», ha «lamentado» ante una enmienda a la totalidad que también ha calificado de «confusa».
Precisamente, que el Gobierno volviera a aprobar el mismo proyecto de ley, en aras del «consenso», es una de los motivos por los que el PP ha intentado vetarlo, devolverlo y que Puente elabore otro nuevo. «Hace dos años, se admitieron 975 enmiendas [parciales]. Solo por ello, por ser coherentes y razonables, ¿no hubiera sido más lógico traer a la Cámara un nuevo texto, cuando las exigencias de medio ambiente y emisiones y en cuanto a punto de recarga [de coches eléctricos] son mucho mayores?», ha preguntado a Puente el diputado del PP Alberto Herrero. «No sé si es dejadez, abandono, falta de convencimiento o simplemente que son ustedes unos vagos«, ha remachado.
«Da la sensación de que está hecha sin rigor, sin ganas, que más allá del ‘todo mal’ no hay argumentos«, ha dicho sobre el veto que ha plantado el PP a un un proyecto de ley que debería estar aprobado antes de que termine el año y para lo que el Consejo de Ministros la aprobó «punto por punto» al que decayó por adelanto electoral del 23-J para aprovechar el «consenso» entre los grupos parlamentarios que ya se había constatado y en el que Puente ha recalcado que también se incluía el de los populares. «El PP nunca mostró su disconformidad ni que fuera a enmendarla a la totalidad. Presentaron 85 enmiendas parciales», ha dicho.
Compromiso con Bruselas
Puente ha vuelto a defender el proyecto de Ley de Movilidad Sostenible ante el Pleno del Congreso debido a que, meses después de empezar a tramitarse, la semana pasada el PP presentó una enmienda a la totalidad que, si hubiera prosperado, habría hecho decaer un texto que el Gobierno comprometió con la Comisión Europea a aprobar antes de que termine 2024, que figura en el Plan Nacional de Recuperación y del que depende fondos europeos.
Ante la enmienda a la totalidad del PP apoyada por Vox al proyecto de ley, el Gobierno había vuelto a quedar en manos de Junts para que no prosperara. El anuncio de que votará en contra de la enmienda del PP permitirá ahora que la Ley de Movilidad Sostenible continúe su tramitación parlamentaria.