Abril será el último mes en el que se repartirán a las familias más vulnerables las habituales bolsas de alimentos, que serán sustituidas por las nuevas tarjetas monedero canjeables en los supermercados y de las que se beneficiarán en torno a 70.000 hogares. Ese cambio de modelo, que fue ratificado por el Gobierno en el mes de enero con el objetivo de desestigmatizar las llamadas ‘colas del hambre’, aspira a reducir la pobreza infantil en España, que presenta la tasa más alta de toda la Unión Europea (UE), y dignificar el abastecimiento de los productos más básicos.
La medida arranca después de que este jueves el Ministerio de Derechos Sociales haya puesto las tarjetas monedero a disposición de las comunidades autónomas, tal y como se comprometió, con la vista puesta en que en 2025 sean las administraciones autonómicas las encargadas de su gestión. «Ahora son los gobiernos autonómicos los que tienen que identificar, valorar y derivar a los potenciales beneficiarios de este sistema para que pueda empezar el reparto de las tarjetas», precisan a 20minutos fuentes del departamento dirigido por Pablo Bustinduy.
Lo «deseable» según el Ejecutivo, es que en mayo ya se estén repartiendo dichas tarjetas en todos los territorios. Así, las familias beneficiarias —hogares con niños a cargo y que cobren menos del 40% de la renta media—, podrán acceder de manera directa a alimentos frescos, alimentación infantil y productos básicos de higiene, incluidos los de higiene femenina. Un cambio que, para Derechos Sociales, «supone una notable mejora respecto al tipo de productos al que optan a través del reparto tradicional de alimentos»; y que va a «complementar» y «reforzar» los recursos que ya existen, como los bancos de alimentos.
Para su administración han contado con la colaboración de Cruz Roja, quien recibió una subvención de más de 100 millones de euros, de los cuales 95,5 ser van a destinar a los gastos en alimentos y productos básicos; y 4,7 irán a los «gastos técnicos» para implementar el programa en todo el país. La ONG ha hecho una licitación pública a la que han accedido siete cadenas de supermercados, donde se podrán canjear las nuevas tarjetas monedero: Carrefour, Alcampo, Eroski-Caprabo, Spar Gran Canaria, Más y Más, Alimerka y Dinosol.
Estos establecimientos fueron elegidos porque cumplían algunos de los requisitos fijados en el real decreto que aprobó en enero el Consejo de Ministros y que materializó este cambio a un nuevo sistema con el que se aplicará el Fondo Social Europeo Plus (FSE+) para luchar contra la privación material a través del Programa «Básico». Una de esas condiciones era que tuvieran la posibilidad de facilitar las tarjetas y excluir aquellos productos «no elegibles» en caja, como los ultraprocesados o bebidas alcohólicas.
De 130 a 220 euros al mes
«Las tarjetas monedero cumplen también con el propósito de ofrecer una mayor cuantía económica a las familias beneficiarias en comparación con el anterior modelo», destacan en Derechos Sociales, donde recuerdan también que las tarjetas tendrán una dotación económica de entre 130 y 220 euros mensuales, en función del número de miembros que formen la unidad familiar. Si está compuesta por un adulto y un niño, recibirán 130 euros al mes; si son tres miembros, 160 euros mensuales; en los hogares formados por cuatro miembros percibirán al mes 190 euros; y en aquellos con cinco o más, 220 euros.
Además, se recargarán como máximo cada tres meses y con una duración que podrá ser de hasta un año, en función de lo que determinen los Servicios Sociales, una vez hayan valorado la situación específica de la familia beneficiaria.
«Además, este nuevo sistema cumple con otro objetivo importante: evitar la estigmatización social que sufren a menudo las familias más vulnerables: aplicando para ello un mecanismo que ya funciona con éxito en otros países europeos», inciden en el Gobierno.